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3. Estrutura portante
Se trata de un sistema autoportante de bastidores estructurales 2D que una vez instalados en obra conforman la estructura completa de una construcción, sin necesidad de tener que convivir con estructuras de laminado en caliente u hormigón.
Generalmente estas estructuras son de aplicación como máximo en edificios de planta baja más tres alturas.
Estas estructuras son diseñadas y calculadas a medida para cada proyecto.
En este sistema diferenciamos entre bastidores estructurales, cerchas y soportes.
Mediante este sistema no solo se diseña y fabrica las partes estructurales de un edificio. También se diseñan y fabrican todas las divisorias interiores, vuelos, pendientes de cubiertas, forjados, volúmenes de antepechos y casetones de cubierta, escaleras, etc.
Este sistema además combina de manera extraordinaria con sistemas estructurales de laminado en caliente u hormigón. Mediante esta hibridación de sistemas se convierte en un sistema muy potente que no tiene límites, mejorando cualquier solución estructural. Combinado con otros sistemas que sirven de apoyo para zonas como por ejemplo núcleos de escaleras y ascensores, suponen un producto muy versátil capaz de dar solución al 100% de las tipologías de construcción, sin sufrir limitaciones de diseño.
Esta solución es perfecta en dos tipologías de proyecto:
– En edificios de hasta planta baja más 3 alturas como estructura principal.
– Para edificios con grandes luces y alturas combinados con sistemas estructurales de acero laminado en caliente u hormigón.
Las ventajas de este sistema de cerramiento de fachadas son:
– Ligereza y limpieza en la ejecución.
– Rapidez y facilidad de instalación, permitiendo acometer los estructuras hasta 10 veces más rápido que con sistemas tradicionales.
– Sencillez en el manejo en obra y reducción de medios especiales de elevación.
– Seguridad y salud en el trabajo, gracias a sus facilidad de instalación, ligereza y simplicidad en el manejo de materiales.
